Los cajeros y la plaga de los niños rumanos
(PD/Agencias).- Al menos 18 menores de 14 años de nacionalidad rumana han sido detenidos en la ciudad de Valencia entre la mañana del martes y la una de la tarde del pasado miércfoles por desvalijar a usuarios de cajeros automáticos.
Cuatro de los pequeños fueron capturados dos veces en el intervalo de tiempo mencionado, dos de ellos con una diferencia de apenas hora y media entre detención y detención.
En todas las ocasiones el patrón se repite: niños de menos de 14 años que entran en los cajeros y, bien al descuido, bien mediante golpes o cualquier otro método de coacción, se hacen con el dinero que los clientes de la oficina bancaria están sacando del dispensador automático.
El botín con el que suelen hacerse en cada golpe es de 500 euros, aunque esta cantidad puede oscilar en función de la cuenta corriente de su víctima.
El hecho de que los pequeños rateros tengan siempre menos de 14 años obedece a que hasta que no cumplen esta edad no pueden ser imputados por ningún delito debido a que, penalmente, no son responsables de sus actos, según la Ley del Menor.