Tom Fuller, también llamado la Calculadora de Virginia o Tom el Negro, era un esclavo de los muchos que fueron llevados a EEUU para trabajar en las plantaciones de algodón en los Estados del Sur.
En 1724, con 14 años, fue capturado en la costa de Liberia y vendido a Elixabeth Coxe para trabajar en su plantación de Alejandría (Virginia). Trabajó toda su vida en la plantación, pero todos los que le conocían hablaban de su facilidad para el cálculo mental. El movimiento abolicionista, nacido en EEUU a finales del siglo XVIII, lo utilizó como estandarte para echar por tierra la estúpida idea de que ”los negros eran inferiores, intelectualmente, a los blancos“.
A la edad de 70 años, y después de mucho tiempo escuchando los prodigios de Tom, dos respetables ciudadanos de Virgina, William Hartshorne y Coates Samuel, decidieron poner a prueba al esclavo con preguntas difíciles o imposibles de calcular mentalmente:
Fuentes: Black History Pages, Mathematician of the African Diaspora, History of Mathematics, African Mathematical Union
Imagen: Sobre Historia
En 1724, con 14 años, fue capturado en la costa de Liberia y vendido a Elixabeth Coxe para trabajar en su plantación de Alejandría (Virginia). Trabajó toda su vida en la plantación, pero todos los que le conocían hablaban de su facilidad para el cálculo mental. El movimiento abolicionista, nacido en EEUU a finales del siglo XVIII, lo utilizó como estandarte para echar por tierra la estúpida idea de que ”los negros eran inferiores, intelectualmente, a los blancos“.
A la edad de 70 años, y después de mucho tiempo escuchando los prodigios de Tom, dos respetables ciudadanos de Virgina, William Hartshorne y Coates Samuel, decidieron poner a prueba al esclavo con preguntas difíciles o imposibles de calcular mentalmente:
- ¿Cuántos segundos hay en un año y medio? 47.304.000 (contestó en un par de minutos)
- ¿Cuántos segundos ha vivido un hombre que tiene 70 años, 17 días y 12 horas? 2.210.500.800 (respondió en un minuto y medio). Uno de los caballeros que se emplea la pluma para hacer los cálculos, le dijo que estaba mal, y la suma no era tan grande como él había dicho. Tom le contestó que se olvidaba de los años bisiestos. Y efectivamente tenía razón.
- La última prueba fue hacer la multiplicación de números de 9 dígitos y también la superó.
nunca aprendió a leer ni escribirMuchos testigos de estas habilidades comentaban que era una lástima que no hubiera recibido una apropiada educación, a lo que Tom contestaba:
It is best I got no learning; for many learned men be great fools (Es mejor no haber estudiado pues muchos eruditos son verdaderos tontos).Falleció en 1790 a la edad de 80 años en la misma plantación donde vivió toda su vida.
Fuentes: Black History Pages, Mathematician of the African Diaspora, History of Mathematics, African Mathematical Union
Imagen: Sobre Historia