Había una vez un muchacho que le preguntó a una chica si se quería casar con él.
La muchacha dijo 'NO'.
Y la muchacha vivió feliz para siempre
Sin lavar,
sin cocinar,
sin planchar para nadie,
saliendo con sus amigas,
tirándose al que le daba la gana,
gastando su dinero en si misma
y sin trabajar para ninguno.
FIN
El problema es que de pequeñas no les contaban este cuento, sino el del maldito Príncipe azul...
Llegado por correoo