Ipod O la Historia de un Emprendedor Olvidado
Recientemente se ha desatado una polémica que se centra en el Ipod de Apple; esto abrió una historia escondida sobre un emprendedor británico, cuyo trabajo fue utilizado hace tiempo ya y reconocido mucho después. La historia muestra el valor de las ideas y la necesidad de la paciencia a la hora de llevarlas a cabo.
Esta historia no tiene desperdicio. La inspiración real para el iPod viene de Kane Kramer, probablemente el británico con menos suerte de la historia. El amigo Kramer creó en 1979 un dispositivo llamado IXI, capaz de reproducir 3,5 minutos de música. En 1988 no logró la financiación necesaria para renovar su patente y su dispositivo fue olvidado. Ahora Apple ha acudido a él para superar el pleito que mantiene con Burst.com acerca de la patente de iPod. IXI servirá para demostrar que Apple no le robó el invento a Burst.com, sino a Kramer. ¿Me lo parece o Apple tiene más cara que espalda?
Kramer confesó al Daily Mail: “Estaba pintando en lo alto de una escalera cuando me llamó una mujer de Apple con acento americano diciendo que era la jefa del departamento legal y quería reconocer el trabajo que yo había hecho. Debo admitir que al principio pensé que mis amigos me tomaban el pelo. Pero hablamos durante un rato, yo en lo alto de la escalera y un poco alucinado por todo, y ella me dijo que Apple quería que fuera a California para hablar conmigo. Tuve que hacer una declaración antes un taquígrafo de la corte y un cámara en las oficinas de los abogados. El interrogatorio con el abogado de Burst fue duro, diez horas. Pero estuve encantado de hacerlo.”
De momento, Apple le paga por las molestias del viaje a California y Kramer está negociando una compensación por todo lo demás. Todo lo demás es, concretamente, que Apple sabía de la existencia de IXI, sabía que era una patente anterior a iPod, sabía que su autor era Kramer, se puso a ganar millones a puñados con el iPod y sólo se acordó del británico para librarse de un juicio que podía salirle más caro. Sólo espero que Kramer les saque ahora todo lo que pueda.
Lo gracioso del caso (o lo más gracioso todavía) es que Kramer afirmó que no se había comprado un iPod. Apple le regaló uno y se le rompió después de ocho meses. El mundo está loco; sólo queda reírse de él. — Rafa M. Claudín.